Como Si por escuchar mi voz debería pagar muy caro… la transparencia de mi ser, la naturalidad de mi acto es condenable y despreciable por cuanto sujeto animado pasa por la vida…
Vuelvo una vez mas a mi misma, acá estoy tranquila y feliz. Cuantos no se tienen ni así mismos en este mundo… Pero, que yo no me vuelva tan a mi interior como para poder ser con los otros… si, se llama miedo, estamos todos de acuerdo con eso, pero pobre del que no lo tenga en su vida porque significa que no tiene nada que perder… yo tengo mucho que perder, a mi misma…
Me pensé como una pieza de un rompe cabezas cambiante, todo el tiempo éste modifica el encastre de sus piezas y yo boyando al lado, no siendo encontrada y cuando soy encontrada no soy la ficha, la pieza de ese rompe cabezas… Me imagine siendo una pieza que cambia porque crece y madura y esta vida no va paralelamente a mí, no quiere congeniar conmigo, o no puede. Me resolví como un crucigrama, como un enigma que no cualquiera quiere dedicarle tiempo o tiene la curiosidad suficiente… me resolví como las hojas amarrillas del libro que una vez alguien leyó y quedo guardado en la biblioteca de la ciudad en la zona de olvidados…
Soy la canción nunca antes pensada, la mente virgen y pura, para el que me encuentre agua por unos días, para el que me olvide una anécdota y para mi toda mi vida…